Capítulo 18: Fuego.

Las palabras que dice Bárbara le hieren profundamente a Santos aunque más le duelen a ella tener que decirlas.
-Marisela: no te creo nada y que eres de lo peor eso ya lo se.
-Santos: Bárbara, ¿Qué estas diciendo, es una broma, verdad?
-Marisela: ¿Pero como quieres que te crea, quieres que te deje vivir tu sucia vida?
-Bárbara: la verdad Santos yo no puedo amar a tan poco hombre, pelele como tu, que no sirves para nada. Yo estoy enamorada de otro.
-Marisela: no os creo a ninguno de los, ¿Tan estupida pensais que soy?
-Bárbara: me da igual lo que pienses, yo solo quiero hacer mi vida sin tener que declarar, te devuelvo a Santos a cambio de que tu me dejes vivir.
-Marisela: acepto tu trato, Santos porque yo deje todo tranquilo.
-Santos: pero...Bárbara.
-Bárbara: Santos te ruego que no me busques, no quiero volverte a ver, a si que alejate de mi.
-Santos: pero tu no me puedes hacer esto y..
-Bárbara: Santos cállate y ni te se ocurra pisar la Barquereña.
-Marisela: ¿Vas a vivir allí?
-Bárbara: no te preocupes que no me acerco a tu Santos, es más, voy a llamar a Pablo para que este conmigo aquí. No volveré a pisar Altamira.
Bárbara coge el caballo y se aleja, derrama una lagrima, Santos esta perdido, es lo que siente sin ella, Marisela solo observa las reacciones de ambos.

-Santos: quiero el divorcio ya.
-Marisela: escuchame bien, antes muerta que darte el divorcio.
-Santos: ¿Qué quieres hacer? tenerme aquí amargado a tu lado, sabes que Bárbara no me quiere, que es lo que querías separanos, ¿Para que quieres seguir casada conmigo, para hundirme, amargarme la vida?
-Marisela: yo no quiero las migagas de esa mujer.
-Santos: a tu madre las respetas.
-Marisela: pues yo no me pienso ir de Altamira eso que te quede claro.
-Santos: pues yo no quiero vivir junto a ti.
-Marisela: pues entonces largate tu, ya que desde que nos casamos todo es de los dos.
-Santos: maldito el día en el que decidi casarme contigo.
Marisela le paga dos cachetadas, dejando a Santos solo desconsolado porque otra vez esta sin Bárbara llega al Miedo, no hay absolutamente nadie, se echa sobre la cama y comienza a llorar, se toca su barriga que en este momento es lo único que tiene para vivir.
-Bárbara: mi amor yo amo a tu padre, pero es que vosotros os mereceis una vida mejor. No puedo condenarlo a vivir fugandose,
Pasadas unas horas, Fuego, que se va propagando hasta rodear la Barquereña, Bárbara se despierta al oler el humo, empieza a toser fuertemente y cuando ve que esta rodeada siente una gran ansiedad.
Santos despierta alterado, mira por la ventana y ve fuego, lo primero que se le viene a la mente es Bárbara, pensar en que ella puede estar ahí dentro lo llena de miedo. Coge su caballo para comprobar si es cierto.
Bábara trata de mantener el control, se encuentra mal realmente, ha intentado buscar algun sitio para salir pero no puede, esta tapada con una sábana para protegerse del fuego, tiene que salir o morirá quemada.
Santos esta frente a la Barquereña horrirazado por la vida de Bárbara, no lo duda y entra protegiendose con un manta que llevaba, la busca por todos lados y la ve desmayada en el suelo, a punto de alcanza las llamas, la carga tapandola para protegerla y la saca para afuera.
Cuando salen, estan tratando de parar el fuego, Bárbara no reacciona, Santos esta para que le de algo, se la lleva hasta a Altamira y cogen la camioneta.
Marisela lo observa todo sonriendo.
-Marisela: ojala se muera.

Santos deja en la cama a Bárbara, le toca del pelo, esta muy preocupado, el doctor sale.
-Doctor: Santos, ¿Bárbara esta embarazada, verdad?
-Santos: si, ¿Qué pasa, que le pasa a mi hijo?
-Doctor: tranquílizate Santos.
-Santos: como quieres que me tranquilice, ¿Puede perder a mi hijo?